lunes, 25 de febrero de 2008
Desafiando a nuestros límites de pensamiento
Me respondió: "Primero hay que pararse, luego dar un paso hacia adelante..."
Lo detuve y le pedí: "Nombrame todas las formas posibles para llegar de este cuarto al otro."
Enumeró: "Puede irse corriendo, caminando, saltando, a los brincos, dando vueltas de carnero... Uno puede llegarse hasta esa puerta, salir de la casa, entrar por la otra puerta y dirigirse a ese cuarto. O bien, si uno quiere, puede saltar por la ventana..."
Le dije: "Ibas a incluir todas las formas posibles, pero cometiste una omisión, una importante omisión. Normalmente yo empiezo por dar el siguiente ejemplo: 'Si quiero pasar de este cuarto a aquel otro, salgo por la puerta, tomo un taxi hasta el aeropuerto, compro un pasaje a Chicago, Nueva York, Londres, Roma, Atenas, Hong Kong, Honolulú, San Francisco, Chicago, Dallas, Phoenix, vuelo en una limosina y entro por el patio de atrás, paso la puerta trasera, y de la habitación del fondo paso a ese otro cuarto.' ¡ Y tú sólo pensaste en ir hacia adelante! No se te ocurrió ir hacia atrás, ¿no es cierto? Tampoco se te ocurrió gatear."
Mi alumno agregó: "Ni deslizarme sobre mi estómago."
¡Nos limitamos tan espantosamente en todo lo que pensamos!
de M. Erickson, "Mi voz irá contigo"
miércoles, 20 de febrero de 2008
El día de hoy no se volverá a repetir
El día de hoy no se volverá a repetir. Vive intensamente cada instante. Lo que no significa alocadamente, sino mimando cada situación, escuchando a cada compañero, intentando realizar cada sueño positivo, buscando el éxito del otro, examinándote de la asignatura fundamental: el Amor. Para que un día no lamentes haber malgastado egoístamente tu capacidad de amar y dar vida.
eres lo que crees
Mahatma Gandhi
lunes, 18 de febrero de 2008
caminos para la felicidad
1. Valorar y reforzar las fuerzas positivas de nuestra alma. Descubrir y disfrutar de todo lo bueno que tenemos. Sacar jugo al gozo de que nuestras manos se muevan sin que sea preciso para este descubrimiento las manos muertas de un paralítico.
2. Asumir después serenamente las partes negativas de nuestra existencia. No encerramos masoquísticamente en nuestros dolores. No magnificar las pequeñas cosas que nos faltan. No sufrir por temores o sueños de posibles desgracias que probablemente nunca nos llegarán.
3. Vivir abiertos hacia el prójimo. Pensar que es preferible que nos engañen cuatro o cinco veces en la vida que pasamos la vida desconfiando de los demás. Tratar de comprenderles y de aceptarles tal y como son, distintos a nosotros. Pero buscar también en todos más lo que nos une que lo que nos separa. Ceder siempre que no se trate de valores esenciales con nuestro egoísmo.
4. Tener un gran ideal, algo que centre nuestra existencia y hacia lo que dirigir lo mejor de nuestras energías. Caminar hacia él incesantemente, aunque sea con algunos retrocesos. Aspirar siempre a más, pero no a demasiado más. Dar cada día un paso. No confiar en los golpes de la fortuna.
5. Creer descaradamente en el bien. Tener confianza en que a la larga -y a veces muy a la larga- terminará siempre por imponerse. No angustiarse si otros avanzan aparentemente más deprisa por caminos torcidos. Creer en la también lenta eficacia del amor. Saber esperar.
6. En el amor, preocuparse más por amar que por ser amados. Estar siempre dispuestos a revisar nuestras propias ideas, pero no cambiar fácilmente de ellas.
7. Elegir, si se puede, un trabajo que nos guste. Y, si esto es imposible, tratar de amar el trabajo que tenemos, encontrando en él sus aspectos positivos.
8. Revisar constantemente nuestra escala de valores. Cuidar de que el dinero no se apodere de nuestro corazón, pues es un ídolo difícil de arrancar de él cuando nos ha hecho sus esclavos.
9. Descubrir que Dios es alegre, que una religiosidad que atenaza o estrecha el alma no puede ser la verdadera, porque Dios o es el Dios de la vida o es un ídolo.
10. Procura sonreír con ganas o sin ellas. Estar seguros de que el hombre es capaz de superar muchos dolores, muchos más de lo que él mismo sospecha.”
José Luis Martín Descalzo
jueves, 14 de febrero de 2008
el funeral
Un día, cuando los empleados llegaron a trabajar, encontraron en la
recepción un enorme letrero en el que estaba escrito:
Al comienzo, todos se entristecieron por la muerte de uno de sus
compañeros, pero después comenzaron a sentir curiosidad por saber
quién era el que estaba impidiendo el crecimiento de sus
compañeros y la empresa.
La agitación en el área deportiva era tan grande, que fue necesario
llamar a los de seguridad para organizar la fila en el velatorio.
Conforme las personas iban acercándose al ataúd, la excitación
aumentaba:
¿Quién será que estaba impidiendo mi progreso?, ¡qué bien que el infeliz
murió!!
Uno a uno, los empleados agitados se aproximaban al ataúd, miraban al
difunto y tragaban saliva. Se quedaban unos minutos en el más
absoluto silencio, como si les hubieran tocado lo más profundo del
alma.
Pues bien, en el fondo del ataúd había un espejo, ...cada uno se
veía a si mismo.
Solo existe una persona capaz de limitar tu crecimiento: ¡TÚ MISMO!
Tú eres la única persona que puede hacer una evolución en tu vida. Tu eres
la única persona que puede perjudicar tu vida, y tu eres la única
persona que se puede ayudar a si mismo.
TU VIDA NO CAMBIA CUANDO CAMBIA TU JEFE, CUANDO TU EMPRESA CAMBIA, CUANDO TUS PADRES CAMBIAN, CUANDO TU PAREJA CAMBIA.
TU VIDA CAMBIA CUANDO TU CAMBIAS. ERES EL ÚNICO RESPONSABLE DE
ELLA."
Los tristes piensan que el viento gime, los alegres piensan que canta".
"El mundo es como un espejo que devuelve a cada persona el reflejo de
sus propios pensamientos. La manera como tu encaras la vida es lo
que hace la diferencia".
viernes, 8 de febrero de 2008
LEYENDA CON AGILIDAD MENTAL
¡¡¡ SE CREATIVO !!! CUANDO TODO PAREZCA PERDIDO, USA LA IMAGINACION. En los momentos de crisis: "Sólo la imaginación es más importante que el conocimiento"
jueves, 7 de febrero de 2008
"Comete un sapo" y salva tu agenda
miércoles, 6 de febrero de 2008
la vida sigue igual
lunes, 4 de febrero de 2008
Optimismo
La principal diferencia que existe entre una actitud optimista y su contraparte ?el pesimismo- radica en el enfoque con que se aprecian las cosas: empeñarnos en descubrir inconvenientes y dificultades nos provoca apatía y desánimo. El optimismo supone hacer ese mismo esfuerzo para
encontrar soluciones, ventajas y posibilidades; la diferencia es mínima, pero tan significativa que nos invita a cambiar de una vez por todas nuestra actitud.
Alcanzar el éxito no siempre es la consecuencia lógica del optimismo, por mucho esfuerzo, empeño y sacrificio que pongamos, algunas veces las cosas no resultan como deseábamos. El optimismo es una actitud permanente de "recomenzar", de volver al análisis y al estudio de las situaciones para comprender mejor la naturaleza de las fallas, errores y contratiempos, sólo así estaremos en condiciones de superarnos y de lograr nuestras metas. Si las cosas no fallaran o nunca nos equivocáramos, no haría falta ser optimistas.
Normalmente la frustración se produce por un fracaso, lo cual supone un pesimismo posterior para actuar en situaciones similares. La realidad es que la mayoría de nuestro tropiezos se dan por falta de cuidado y reflexión. ¿Para qué sirve entonces la experiencia? Para aprender,
rectificar y ser más previsores en lo futuro.
El optimista sabe buscar ayuda como una alternativa para mejorar o alcanzar los objetivos que se ha propuesto, es una actitud sencilla y sensata que en nada demerita el esfuerzo personal o la iniciativa. Sería muy soberbio de nuestra parte, pensar que poseemos el conocimiento y los
recursos necesarios para salir triunfantes en toda circunstancia.
Cualquiera que ha sido campeón en alguna disciplina, llegó a colocarse en la cima por su esfuerzo, perseverancia y sacrificio, pero pocas veces, o mejor dicho nunca, se hace alusión a su optimismo, a esa entrega apasionada por alcanzar su fin, conservando la confianza en sí mismo y en las personas que colaboraron para su realización. El optimismo refuerza y alienta a la perseverancia
El optimista no es ingenuo ni se deja llevar por ideas prometedoras, procura pensar y considerar detenidamente todas las posibilidades antes de tomar decisiones. Si una persona desea iniciar un negocio propio sin el capital suficiente, sin conocer a fondo el ramo o con una vaga idea de la administración requerida, por muy optimista que sea seguramente fracasará en su empeño, ya que carece de las herramientas y fundamentos esenciales para lograrlo.
En otras circunstancias nos engañamos e inventamos una falsa realidad para hacernos la vida más fácil y cómoda. Basta mencionar al estudiante que se prepara poco y mal antes de sus evaluaciones, esperando obtener la calificación mínima y necesaria para "salir del paso", sin darse cuenta que su falso optimismo lo llevará ?tarde o temprano- al fracaso.
Se podría pensar que el optimismo nada tiene que ver con el resto de las personas, sin embargo, este valor nos hace tener una mejor disposición hacia los demás: cuando conocemos a alguien esperamos una actitud positiva y abierta; en el trabajo, una personalidad emprendedora; en la
escuela, profesores y alumnos dedicados. Si nuestras expectativas no se cumplen, lo mejor es pensar que las personas pueden cambiar, aprender y adaptarse con nuestra ayuda. El optimista reconoce el momento adecuado para dar aliento, para motivar, para servir.
En la amistad y en la búsqueda de pareja también es necesario ser optimista. Algunas personas se encierran en sí mismos después de los fracasos y las desilusiones, como si ya no existiera alguien más en quien confiar. El optimismo supone reconocer que cada persona tiene algo bueno,
con sus cualidades y aptitudes, pero también sus defectos, los cuales debemos aceptar y buscar la manera de ayudarles a superarlos.
El paso hacia una actitud optimista requiere de una disposición más entusiasta y positiva, es tanto como darle la vuelta a una moneda y ver todo con una apariencia distinta:
- Analiza las cosas a partir de los puntos buenos y positivos, seguramente con esto se solucionarán muchos de los inconvenientes. Curiosamente, no siempre funciona igual a la inversa.
- Haz el esfuerzo por dar sugerencias y soluciones, en vez de hacer críticas o pronunciar quejas.
- Procura descubrir las cualidades y capacidades de los demás, reconociendo el esfuerzo, el interés y la dedicación. Esto es lo más justo y honesto.
- Aprende a ser sencillo y pide ayuda, generalmente otras personas encuentran la solución más rápido.
- No hagas alarde de seguridad en ti mismo tomando decisiones a la ligera, considera todo antes de actuar pues las cosas no se solucionan por sí mismas. De lo contrario es imprudencia, no optimismo.
No es más optimista el que menos ha fracasado, sino quien ha sabido encontrar en la adversidad un estímulo para superarse, fortaleciendo su voluntad y empeño; en los errores y equivocaciones una experiencia positiva de aprendizaje. Todo requiere esfuerzo y el optimismo es la alegre manifestación del mismo, de esta forma, las dificultades y contrariedades dejan de ser una carga, convirtiéndonos en personas productivas y emprendedoras.
viernes, 1 de febrero de 2008
Crea tu propia vida
Algunas veces te pasan cosas que parecen horribles, dolorosas e injustas, pero en realidad debes entender que sin superar esas cosas jamás podrás realizar tu potencial,
tu fuerza, o el poder de tu corazón.
Todo pasa por una razón en la vida. Nada sucede por casualidad o por la suerte. Enfermedades, heridas, el amor, momentos perdidos de grandeza o de pura tonterías, todo ocurre para probar los límites de tu alma. Sin estas pequeñas pruebas la vida sería como una carretera recién pavimentada, suave y lisa. Una carretera directa sin rumbo a ningún lugar, plana, cómoda y segura, mas empañada y sin razón.
La gente que conoces afecta tu vida, las caídas y los triunfos que tú experimentas crean la persona que eres.
Aun se puede aprender de las malas experiencias. Es mas, quizás sean las más significativas en nuestras vidas. Si alguien te hiere, te traiciona o rompe tu corazón le das gracias porque te ha enseñado la importancia de perdonar, de la confianza y a tener más cuidado de a quien le abres tu corazón.
Si alguien te ama, ámalo tú a él, no porque él te ama sino porque te ha enseñado a amar y a abrir tu corazón y tus ojos a las cosas pequeñas de la vida. Has que cada día cuente y aprecia cada momento, además de aprender de todo lo que puedas aprender, porque quizás mas adelante no tengas la oportunidad de aprender lo que tienes que aprender de este momento.
Entabla una conversación con gente que no hayas dialogado nunca o últimamente, escúchalos y presta atención. Permítete enamorarte, liberarte y poner tu vista en un lugar bien alto. Mantén tu cabeza en alto porque tienes todo el derecho a hacerlo.
Repítete a ti mismo que eres un individuo magnifico y créelo, sino crees en ti mismo nadie mas lo hará tampoco. Crea tu propia vida, encuéntrala y luego vívela.